(c) El problema del doce de Octubre
Me habría gustado escribir sobre el asesinato de Dato y su posible conexión con el desastre de Annual, pero será en otra ocasión. Sin embargo, escribiré sobre Inejiro Asanua, político socialista japonés, asesinado en un plató de televisión por un estudiante de extrema derecha de diecisiete años. Normalmente, los nombres de los asesinos suelen pasar desapercibidos. En este caso, no es así, ya que el nombre del asesino era Otaya Yamaguchi.
Poco se puede decir de las causas del asesinato, aunque todo indica que Asanuma, presidente del partido socialista japonés defendía la no injerencia americana en los asuntos de Extremo Oriente, escasamente veinte años después de finalizada la segunda guerra mundial. Desde una perspectiva occidental, esta política, con la que posiblemente estaban de acuerdo todos los dirigentes del partido, habría parecido, hoy día, un suicidio.
Nunca se pudo demostrar que el presidente socialista estuviera involucrado en algún tipo de escándalo político, financiero o de otro tipo, por lo que las causas de su asesinato fueron exclusivamente políticas al defender un antiamericanismo en una zona de conflicto secular entre árabes y judíos. En este punto, habría que realizar otra entrada sobre las verdaderas causas del conflicto en Oriente Próximo, motivo o causa de la guerra civil en Siria que ha producido millones de refugiados y un éxodo que ha afectado a Europa además de estar de acuerdo de iniciar una apertura con la China comunista.
Asanuma es asesinado el doce de Octubre de mil novecientos sesenta. Evidentemente, todos aquellos países dentro de esa zona conflictiva que habrían mejorado sustancialmente su situación con la ayuda de los norteamericanos, serían sospechosos del crimen. Lo que sí parece cierto es que la CIA nada tuvo que ver con el crimen directamente, aunque posiblemente Asanuma obedecía órdenes del Kremlin o se había aliado con países o facciones antiamericanas en Oriente Próximo.
En aquella época, posiblemente Siria, como en la actualidad, se había desplazado políticamente hacia la esfera rusa. El cómo pudieron asesinar a Inejiro es una buena pregunta que no tiene respuesta en una sociedad civil. Y aquí escribo la respuesta militar. Se produjo por esas fechas un tsunami que asoló la zona costera que defendía y protegía el político socialista. El asesino y el tsunami, objeto y sujeto, coincidieron en tiempo real. De hecho el asesino se abalanzó sobre Asanuma sin que nadie pudiera evitarlo. Asanuma, en aquella época, simbolizaba también la libertad de expresión y cierta liberación sexual. La decisión de asesinato posiblemente salió de algún tipo de asamblea japonesa de la extrema derecha del país, por lo que el asesinato fue largamente meditado y proyectado.
Doy por finalizada esta entrada. 16/10/2019
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